¿Y en el 2010 qué?

Pues mi impresión es que todo esto que empezó en el último trimestre del 2007, continuará su curso lógico, y es que lo lógico no es que de la noche a la mañana el dinero fluya a raudales, como si las aguas que están cayendo del cielo fueran euros.

Si analizamos lo que ha estado ocurriendo, nos daremos cuenta de la trayectoria, después de llegar a un punto máximo de despropósito y locura, el motor que nos lanzaba se está deteniendo, ese motor era el dinero fácil que los bancos iban lanzando a diestro y siniestro, ahora sus bolsas están vacías, no lo cuentan abiertamente, están asustados, pero vemos como están cerrando oficinas, que ya no necesitan, como están prejubilando a sus empleados, porque ya no les son necesarios, como se están fusionando para hacerse más fuertes, lo malo es que lo hacen muy despacio, como queriendo dar la impresión que no es importante, pero lo es, se trata de su supervivencia.

Lo que en principio parecía que solo era problema de unos cuantos bancos estadounidenses, ahora se ha manifestado como una implosión financiera de enormes magnitudes y de carácter global, y aquí, en España es muy fuerte.

La consecuencia de tanto despilfarro es que no solo no se crea empleo, sino que cada día se destruye más, y no se va a crear más puestos de trabajo, todo aquello que antes era necesario ha dejado de serlo, lo peor es que es muy posible que sacrifiquemos el planeta entero para intentar continuar o mejor dicho retrasar el mayor tiempo posible lo que antes teníamos. Por eso nos han lanzado unos ficticios brotes verdes.

Al final la realidad se impondrá en toda su magnitud, no habrá ninguna ilusión que la pueda tapar, y mientras antes la asumamos antes podremos aclimatarnos al nuevo entorno, no es mejor taparnos los ojos si estamos en medio de la carretera y se nos viene encima un trailer sin frenos.

Pero parece que hasta que el Estado esté en quiebra, o quiebre alguna de las grandes entidades financieras, por su impotencia total, no llegaremos al final de este callejón sin salida.

Así que este 2010 será muy malo pero lo peor no ha llegado, el 2011 será mucho peor, será el final.